
¿Qué es una revolución?
Es un cambio radical de tendencia, un antes y un después, una nueva forma de hacer las cosas. En la agricultura almeriense ya la hubo con la implantación del control biológico. En este sistema se producen los cultivos con menos productos fitosanitarios y están mejor monitoreados. Es una nueva agricultura que utiliza la lucha integrada ayudándose de la fauna auxiliar entre otras técnicas. Hoy en día existen más de 26.000 hectáreas de cultivo protegido bajo el control por estos depredadores, según la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible.
La innovación y la investigación en la búsqueda de mejores y mayor número de depredadores, tanto como en la forma, momento y cantidad de su aplicación, es la pelea que tienen las empresas de control biológico. A una media de 1,5 millones de «bichos» por hectárea, estamos hablando de más de 40.000 millones de sueltas al año entre Granada y Almería.
Aunque parezca obvio decirlo, pero lo que el agricultor está preparándose y previniéndose a un ataque de plaga incorporando en su cultivo fauna auxiliar (Amblyseius swirskii, Orius laevigatus, Nesidiocoris tenuis, Aphidius colemani, Phytoseiulus persimilis, etc). Es como tener el sistema inmunológico de nuestro cuerpo preparado para cualquier ataque de una enfermedad.

A son de dicha revolución, las empresas de fitosanitarios han incorporado productos mucho más respetuosos con el medio ambiente. Pues en ese estado de convivencia, dichas aplicaciones fitosanitarias, deben de ser más selectivas contra la plaga y respetuosa con la fauna auxiliar. Además se reducen drásticamente los residuos en el cultivo y con menos contraindicaciones para el aplicador.
En un mundo en el que la salud y lo saludable está en la mente de un gran numero de consumidores, se añaden también las restricciones, en lo que materias activas de los productos fitosanitarios se trata. Ciertos supermercados, al contratar sus campañas de producto, sólo permiten el uso de 4 o 5 materias activas para combatir contra las plagas y enfermedades. Esto dificulta mas si cabe, el llegar con la producción suficiente para que sea rentable al agricultor y obtener la calidad del producto que exige el mercado. Pero no hay ninguna duda de que este es el camino, y en lo que a seguridad alimentaria se refiere, es la prioridad número uno hoy en día.

La revolución en el pimiento california
En la presente campaña de pimiento en Almería, no ha sido una revolución pero sí que ha sido un gran cambio de tendencia en la elección de variedades comerciales por parte del agricultor. Se han decantado por elegir variedades resistentes a una enfermedad que estaban sufriendo tanto agricultores de ecológico como el convencional, el oídio. Es un hongo que obtiene los nutrientes de células huéspedes vivas ( biotrófico) y que puede causar varios daños directamente en las partes vegetativas e indirectamente en los frutos.
Los agricultores se han decantado por elegir variedades resistentes a oídio.
Ya se introdujeron hace unos años variedades con una resistencia intermedia bastante baja frente al oídio. Pero fue el detonante para que todas las empresas productoras de semillas empezasen su carrera particular para el desarrollo de nuevas variedades con la incorporación de la resistencia a Oídio (Leveillula taurica). Esta batalla de competición ha incorporado al mercado numerosas opciones para que el agricultor pueda elegir diferentes variedades adaptadas a distintas fechas de plantación en la tipología de California rojo, naranja y amarillo.

Pero es la presente campaña 2021, el aumento de la oferta variedades comerciales y el nivel de resistencias, han declinado la balanza a un cambio drástico a variedades resistentes a Oídio.
A nivel genético, la resistencia de las diferentes casas comerciales provienen de diferentes fuentes. No es el caso de la resistencia al virus del Spotted por ejemplo, ya que el gen de resistencia es el mismo en todas las variedades del mercado. Y además hay muchos casos en los que solamente un parental está aportando dicha resistencia.
El material vegetal comercial con el que contamos actualmente, tienen diferentes respuestas a la presión de la enfermedad en la finca.
El nivel de resistencia a oídio se describe como intermedia. Esto no implica inmunidad, y el cultivo bajo condiciones de presión de oídio, puede verse afectado por la enfermedad. Hay que tener en cuenta que las condiciones optimas de desarrollo son entre 20 y 30º y 70-80% de humedad relativa.

Pero gracias a estas variedades, reducimos más de un 70% los tratamientos fitosanitarios, además de la reducción de costes que conlleva. Pero no debemos de olvidar en realizar tratamientos preventivos para evitar su propagación, ya que se están dando casos de no realizar dichos tratamientos y la presión empieza a ser muy fuerte en este periodo.
Sin duda, los cambios que se están produciendo en la agricultura almeriense y granadina, son más sostenibles, más respetuosos con el medio ambiente y a una tendencia muy clara al residuo cero, ofreciendo productos más saludables.
Admiro este blog, imparte unos conocimientos de la agricultura que como consumidora no te los planteas cuando adquieres un producto.
Aprendo mucho. Gracias